VERDAD CRISTIANA
- El Nuevo Testamento
enseña que DIOS se hizo Hombre y vino habitar entre nosotros, encarnándose
en JESUCRISTO, Segunda Persona de la Trinidad.
JESÚS ejecutó
de modo admirable SU preciosa Misión de Amor, haciendo la redención de la
humanidad ante el CREADOR y dejando los medios necesarios
a nosotros con el objetivo de que las personas sean felices aquí en la
Tierra y alcancen la salvación eterna en el Cielo. JESÚS está presente
en los Sacramentos y en el Sacerdocio Eclesiástico, de la misma manera
que está presente por la gracia, en cada criatura que sigue SUS enseñamientos.
Escondido a los ojos del mundo, CRISTO el verdadero DIOS y verdadero
Hombre, está presente sobre todo en el Sacramento de la Eucaristía, en
Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad. La más pequeña partícula consagrada,
esconde misteriosamente SU divinidad, SU gloria y poder, porque el SEÑOR
quiere que nosotros nos acerquemos de ÉL por amor, sin cualquier interés
y sin tener la intención de buscar algún beneficio, pero modestamente pobres
en espíritu y puros en intenciones. ÉL quiere que SUS hijos revelen estar
arrepentidos de sus culpas y tengan la intención de retractar todas las sus
transgresiones, por medio del Sacramento de la Confesión, conscientes de
que en la Sagrada Comunión ÉL está Realmente Presente y ÉL dárse
integralmente en la porción más pequeña del sacramento, porque
ÉL es DIOS Vivo y Verdadero, Sacramento de
Vida y Amor.
LOS INCRÉDULOS
- Desgraciadamente
hay muchas personas que no creen, que no aceptan y no tienen el respeto
más pequeño por esta verdad y hacen también una interpretación extraña
y falsa sobre la expresión
"banquete de la eucaristía ", considerándola al pie de la letra, o sea, como si fuera justo
una comida, memoria de la última Cena que el SEÑOR hizo con los
Apóstoles en Jerusalén. Y así, ellos consideran la Sagrada
Comunión como un "símbolo"
de la presencia de JESUS y no
como "SU Presencia Real
y Verdadera" que en la verdad es. No creyendo,
aunque siendo criaturas como nosotros, niños del Mismo CREADOR,
ellos hacen su propia opción de vida. Dejando el camino de la Verdad
ellos tendrán que sujetarse a las consecuencias de su decisión.
El DIOS
omnipotente derrama sin interrupciones, independientemente de cualquier
merecimiento nuestro, un inmenso manantial de gracias sobre las personas
de todas las generaciones. En SU bondad infinita de PADRE, no hace
distinciones y ni discriminaciones entre las personas "de bien" y
aquellas que "no son
buenas". SUS gracias son para todos. Las
criaturas con su libertad de opción, es que van dar la bienvenida
o no, a la "donación
Divina" que son
proporcionadas a nosotros. Podríamos comparar diciendo que, la
voluntad de las personas a recepción de las gracias, opera como
si fuese una válvula del corazón: existen aquéllos que abren el corazón
y las reciben en cantidad, así como hay otras personas que se quedan
cerrados a los innumerables beneficios de DIOS. También entre
aquellos que se abren, hay un grado variado de intensidad amorosa
en la solicitación y recepción de las gracias. Hay aquéllos que se
abren mucho más, que son más disponibles, más celosos,
sinceros y creyentes, que buscan ser más competentes y
esmerados, y aquéllos que se abren menos, que no son tan
puntuales, que no poseen una sólida perseverancia, que son
secos, impacientes en el tratamiento con las cosas sagradas y no
muy disponibles en su relación con
NUESTRO SEÑOR.
El Amor de DIOS es el mismo para todos SUS niños. Nosotros es que Lo acogemos en grandeza diferente, en virtud de la manera desigual que cada persona se presenta a recibirlo. Por consiguiente, los que se abren más y son más perseverantes, reciben mucho más gracias del SEÑOR.
PRUEBA DEFINITIVA
- Siendo la Eucaristía
el vínculo más fuerte que realiza la unión entre todos los cristianos en si
y de ellos con DIOS, de una manera maravillosa e incontrovertible, el
CREADOR viene a demostrar al mundo a través de la vidente Julia
Kim, que en la Santa Misa, en el momento de la Consagración,
ocurre de verdad el fenómeno sobrenatural de la"Transubstansiación". El ESPÍRITU SANTO transforma de modo
verdadero, las especies de pan y vino en Cuerpo, Sangre, Alma
y Divinidad del SEÑOR, pero ellas se quedan aparentemente con
los mismos aspectos de pan y vino. Así, en la Corea del Sur, en el
momento de la Comunión, en diversas oportunidades, cuando el sacerdote
puso la Hostia Consagrada en la lengua de la vidente, señora Julia Kim,
ella se transformó en el Cuerpo y en la Sangre del SEÑOR, de manera
visible e impresionante, dejando perplejos de admiración personas
del mundo entero, legos y autoridades religiosas que dieron
testimonio en varias ocasiones, en razón del extraordinario y
sobrenatural celo Divino a demostrar la Presencia Real de
JESUCRISTO en la SAGRADA EUCARISTIA.
FRECUENCIA DE LA
MANIFESTACIÓN -
Los Milagros Eucarísticos se repitieron
por más
de 20 veces hasta hoy, en locales diferentes, incluso en el Vaticano,
siempre causando admiración y emoción, en virtud de la grandeza
y claridad absoluta con que eso se pasa. Además de esas manifestaciones,
otras también han se pasado por medio de Julia Kim, poniendo en evidencia
la Sagrada Comunión. Por ejemplo, la vidente al coger agua en una Fuente
próxima a Capilla, en el fondo del recipiente apareció la imagen de una
Hostia del tamaño grande. En el tejado de la Capilla, también
se vio en varias oportunidades, proyectadas por la luz del sol,
la imagen de un Cáliz y de una Hostia. Hay muchas fotos y
varios vídeos sobre los fenómenos.
Por esa razón, con la intención de testificar los fenómenos Eucarísticos, en la secuencia daremos detalles y describiremos algunos de los eventos.
SÉPTIMO MILAGRO
- Él se pasó en una
tal circunstancia, que la Iglesia Católica en el mundo entero se dio cuenta
del hecho. Estaba presente el Nuncio Apostólico de la Santa Sede en
Corea. El Arzobispo del Vaticano informó al Director espiritual de la
vidente Fray Raymond Spies y las otras autoridades presentes,
que no estaba allí en la Capilla como un simple peregrino, pero
vino como representante oficial, en la Celebración Eucarística
del 24 de noviembre de 1994, conmemorativa del 2º Aniversario del
derramamiento de aceite perfumado por la imagen de NUESTRA
SEÑORA.
En la presencia del Nuncio Apostólico todos oraban, mientras nuestra MADRE BENDITA particularmente hablaba con Julia, en la preparación del milagro admirable que se pasó. Primero NUESTRA SEÑORA dijo que Julia fuese a recibir la bendición del Arzobispo y del Fray Spies. Después ELLA le envió el Arcángel San Miguel que le dio una Hostia Consagrada, para ella conducirla a los dos prelados. La Hostia que el Arcángel trajo era del tamaño grande, similar aquéllas que los sacerdotes usan en las celebraciones de las Misas. San Miguel no era visible a las personas en la Capilla, sólo era visto por la vidente que acompañó todos sus movimientos. Sin embargo, las personas pudieron ver la Sagrada Partícula aparecer de súbito entre los dedos de Julia. En la Hostia estaba grabada la imagen de una Cruz entre dos letras: (Alfa) y (Omega), de la misma manera como aparecieron en una foto de otro milagro proporcionado por NUESTRA SEÑORA el 27 de junio de 1993. La Partícula traída por San Miguel ya estaba rota en dos partes cuando Julia la recibió, por ese motivo ella quedó con una parte en la mano derecha y otra en la mano izquierda. De modo inesperado, por fuerza de una poderosa luz venida de cima, Julia cayó, pero mantuvo los dos pedazos de la Sagrada Hostia en las manos. En seguida, se levantó cuidadosamente y dio los dos pedazos al Nuncio y a Fray Spies. Los prelados tomaron comunión con uno de los pedazos y el otro, fue distribuido en porciones pequeñas en orden de dar Comunión a las personas que estaban en la Capilla, totalmente perplejas, en completo asombro y temor, delante la grandeza de los eventos. Aunque fuese a la mitad de una Hostia grande, toda la gente en la Capilla, cerca de 70 personas, recibieron la Comunión. Admirados, muchos testificaron que simplemente era una experiencia que desafiaba la comprensión humana, y también eso, hizo recordarles el pasaje evangélico de la multiplicación de los panes. (Mateo 14,13-21).
En el momento
en que Julia recibió el pedazo pequeño de la Sagrada Comunión en la lengua,
sorprendentemente la Partícula creció alcanzando el tamaño
de una Hostia pequeña absolutamente normal. El Nuncio Apostólico
al presenciar el fenómeno, respetuosamente quitó la Hostia de la boca
de Julia y mostró a las personas. Después con Fray Spies, la puso en
la Custodia, guardándolo cuidadosamente afín de ella
testificar más esa notable manifestación.
En la secuencia, NUESTRA SEÑORA habló a la Vidente, que aquella Hostia grande que el Arcángel trajo , debería ser consumida por un sacerdote, pero San Miguel no permitió porque él estaba en estado de pecado y JESUS no podría vivir en él. Esta realidad hace presente una conclusión muy importante: durante la Comunión en las Santas Misas, las personas que están en pecado e insisten en recibir la Hostia Sagrada , ellos no reciben al SEÑOR de verdad porque DIOS solo habita en los corazones limpios y puros. Así ellos reciben "trigo y agua y la propia condenación."
Julia quiso
volver a su casa pues deseaba escribir los mensajes de NUESTRA
SEÑORA y dárselos al Arzobispo. Mientras, al salir de la Capilla,
cuando ella caminaba con dificultades debido a los dolores continuos de
la crucifixión que recibió en su cuerpo, nuestra MADRE BENDITA
llamó a ella de nuevo. Atendiendo la solicitación, vino
próximo a la imagen de la VIRGEN MARIA y tomó las manos de
Nuncio y de Fray Spies por solicitación de la VIRGEN. Entonces
NUESTRA SEÑORA preguntó a Julia, se ella deseaba recibir
la Sagrada Comunión una segunda vez. En esta oportunidad
el Arcángel trajo una Hostia más pequeña,
igual aquéllas que los fieles reciben en las Misas, y dio
comunión a vidente. Cuando ella recibió la Partícula Sagrada en
su lengua, en lugar de la Partícula quedarse en la posición
horizontal, asumió la posición vertical, como si quisiera estar
en pie. El Arzobispo al ver la Partícula aparecer de súbito en
la boca de la vidente y observándola en la posición vertical,
la quitó inmediatamente y mostró a las personas que no
salían de la Capilla. Se hicieron muchas fotos para registrar el
sorprendente evento. A continuación, el Arzobispo dio la Hostia a Fray Spies
que lo puso en la misma Custodia donde estaba la otra y tomándolos
a su residencia, mientras las personas regresaban calladamente
a sus casas. Esta Partícula también está en la foto abajo, en el
Ostensorio más pequeño.
Después de todos estos acontecimientos el Nuncio Apostólico quedó lleno de asombro y tan entusiasmado, que no consiguió dormir durante tres noches seguidas, pensando en aquellos extraordinarios hechos sobrenaturales. Cuidadosamente y con la más grande atención, examinó las ocurrencias en Naju desde el principio en 1985 hasta aquella fecha, con el objetivo de preparar un dossier y registrar con detalles la sucesión de los hechos. Al mismo tiempo, el Arzobispo Victorinus Yoon de la Archidiócesis de Kwangju que abraza la Parroquia de Naju, formó un comité para preparar un proceso de investigación en el orden de coleccionar documentos y verificar los eventos, como parte inicial del proceso canónico.
El Nuncio Apostólico examina la Hostia que fue retirada de la boca de Julia. - Ostensorio más pequeño con las Hostias.